Reformemos nuestro estudio - Mao Tse-Tung

Este breve texto del revolucionario chino Mao Tse-tung, fue escrito para una reunión de cuadros del Partido Comunista de China celebrada en Yenán en 1941 con el objetivo aportar a la rectificación del estilo del trabajo del partido, en particular como se asumía el estudio del marxismo-leninismo por su militancia.

El texto empieza señalando que, luego de la I Guerra Mundial y la Revolución de Octubre, en los primeros veinte años de existencia del Partido Comunista de China, se ha hecho evidente lo importante que ha sido la ligazón del marxismo-leninismo con la práctica de la Revolución China. Pero a pesar de esto, existen aún serias deficiencias que se tienen que superar, como el nada sistemático acopio de información y un ambiente estimulante para el estudio y la investigación.

En ese sentido, no se aborda a profundidad el estudio de la teoría y menos de la realidad, quedándose solo en un conocimiento fragmentario desde los deseos y no propiamente de las condiciones objetivas. Es así que no se logra estudiar la historia de China ni las experiencias revolucionarias internacionales en función al conocimiento integral de los clásicos del marxismo-leninismo, como también los problemas de la Revolución China y llegar a soluciones, en todo caso, como si la práctica revolucionaria no lo exigiera.

Lo que se ve es un estudio e investigación nada sistemático y poco minucioso, llegando solo a suposiciones y conocimientos superficiales basados solo en ideas generales que dejan de lado la realidad, como también la enseñanza del marxismo-leninismo sin producir nuevos conocimientos sobre China. Queda claro que esto es un perverso estilo de trabajo, un método que rompe la unidad de teoría y práctica, centrándose en la ruptura, enseñando el marxismo-leninismo sin corresponder con las particularidades de China, lo cual lleva a tener poco interés en conocer la sociedad, sus problemas y como resolverlos mediante la revolución.

En ese sentido, se perciben dos actitudes.

Subjetivismo, que es basarse en el entusiasmo y no en el estudio de la realidad, lo cual se expresa en dedicarse solo a conocer el marxismo-leninismo abstractamente, obtener conocimientos que no tienen nada que ver con China y lograr “brillar” o ser “infalibles”, pero también a no dedicarse a estudiar el marxismo-leninismo y solo a desarrollar actividad política guiados por el entusiasmo y el deseo de hacer la revolución; en ambos casos no se parte de la realidad china y así orientar o desarrollar la práctica revolucionaria.

El revolucionario marxista-leninista, que es estudiar la realidad sistemática y minuciosamente valiéndose de la teoría y otros procesos revolucionarios, motivado por el entusiasmo y el espíritu practico, lo cual es unir el marxismo-leninismo con la practica de la Revolución China para descubrir la ligazón interna de los acontecimientos en los diferentes niveles de la realidad y llegar a conclusiones que permitan avanzar a la revolución.

Finalmente, el objetivo del conocimiento de la realidad es transformarla, por lo que solo el que investiga tiene derecho a hablar. La idea es partir de los hechos objetivos para encontrar soluciones justas, por lo que es necesario el cambio en el estilo de trabajo del partido desplegando una labor que asegure el estudio y la investigación. Si bien en más de una ocasión se darán errores, se tiene que entender que estos son los precursores de la verdad.

Enlace al texto: https://drive.google.com/.../1GRAlKMecd9NPrhaG1lg.../view...